Un estudio del Hospital del Sagrado Corazón de Gangnam en Seúl publicado en ‘Neurology’ indica que las personas que suben o bajan de peso de reciente diagnóstico de párkinson tienen más probabilidades de experimentar cambios en sus habilidades de pensamiento que las personas que se mantienen en su peso pudiendo provocar un deterioro cognitivo. Se compararon 358 personas con menos de dos años de diagnósticos que aún no habían tomado medicamentos con 174 personas sin la patología.